Y, como ocurre con la publicidad, estas convenciones y distorsiones influyen en nuestra visión del mundo, creencias y opiniones (eso no tiene porqué ser malo, pero debemos ser conscientes de ello).
Por ejemplo, es una convención que se coloque en los mapas que estudiamos se sitúe Europa en el centro. En otros países como EEUU o China, la disposición de los continentes en el rectángulo de la proyección de Mercator (también llamada cilíndrica) es diferente. Veámoslo:
Mapa usado en las escuelas de EEUU en el a lo largo del s. XX
Planisferio chino
¡Pero la cosa no queda ahí! El colocar el norte en la parte superior del mapa no deja de ser también una convención (que procede del geógrafo del s. II Ptolomeo, que fue el primero que lo hizo), así que Australia prefieren colocar en esa parte superior el hemisferio sur. Así la isla queda no sólo centrada sino en una situación más destacada con respecto al resto del mundo.
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